El verdadero caballo de batalla para muchas personas que comienzan a entrenar y terminan dejándolo pronto. Hay que sumarle también la llegada de las ansiadas vacaciones de verano y el intenso calor que se da en esta época. ¿Cómo conseguir motivación para hacer deporte de manera continua? ¿Cómo conseguir crear un hábito en el que disfrutemos y no sea una pesadilla? ¿De qué manera es posible ser feliz buscando nuestros límites y no cayendo en la pereza?
Podríamos definir la motivación deportiva como aquel factor que nos empuja a continuar, a no desfallecer y buscar una mejora constante incluso cuando nos encontramos fatigados, con obstáculos en el camino o cuando nuestra cabeza nos pide parar. Esta es, sin lugar a dudas, la gran diferencia entre las personas que alcanzan sus metas deportivas y aquellas que se quedan a medio camino.
La motivación para hacer deporte también se puede entrenar. O, por lo menos, se puede estimular para conseguir que la pereza no se apodere de nosotros. A continuación, vamos a ofreceros unos cuantos consejos que seguro que os resultan de gran utilidad:
- Visualiza tu meta: Sin un objetivo definido es muy difícil mantener la motivación en una actividad, da igual cuál sea. De este modo, fíjate una meta y sabrás por qué estás haciendo las cosas. Todas son válidas y cada persona ha de buscar la suya propia.
- Haz una lista con prioridades: Quizá tengas más de un objetivo. O quizá te hayas marcado metas a corto, medio y largo plazo. Haz una lista y ordénala según tus prioridades.
- Reflexiona. Anota también todas las razones por las que quieres alcanzar esas metas. ¿Por qué te vas a sentir mejor si las consigues? En momentos de bajón, recurre a esta lista y conseguirás la suficiente motivación para hacer deporte y no abandonar.
- Confía en ti: Os sorprendería saber cuántas personas hemos conocido que no tienen la suficiente confianza en sí mismos para alcanzar todas las metas que se proponen. Tener un mal concepto propio nos mina la moral y nos impide avanzar por el camino adecuado.
- Apuesta por la constancia: No busques excusas. Busca motivación y refuerzos positivos.
- Cambia tus rutinas: Hacer siempre los mismos ejercicios es un camino que nos lleva al fracaso. Trata siempre de variar tu entrenamiento y no te resultará aburrido, sino estimulante.
- El descanso es tan importante como el entrenamiento: Aunque te cueste creerlo, en la motivación para hacer deporte juega un papel importante el descanso. Desconectar un tiempo o unos días nos permite recargar las pilas y no saturarnos. Es preferible ausentarnos dos o tres días que abandonar pasados tres meses.
- Hidrátate bien en esta época de altas temperaturas y no hagas excesos innecesarios. A veces "menos es más".
